capitulo 39

Después de saborear sus labios, Oscar rechaza a Regina. Se la aparta de él. La mira con reproche. Y ella que está tan feliz de estar con él le da pena esa mirada.
--¿¿que te pasa...??
Oscar se lleva las manos a la cabeza:
--¡¡no tienes derecho a besarme...¡¡
--tú también me besaste... Llevo tanto tiempo deseando este beso...
Él la mira emocionado pero dolido. Todo en él está revuelto no confía en ella:
--¿¿¿crees que puedes irte y volver cuando se te pegue la gana...??
--claro que puedo pero si tú no me quieres ver... me voy...
Ella se gira pero él le agarra del brazo.
--no te vayas... ¡¡yo te he esperado durante años... y tú no volviste...¡
--tampoco han sido años...
--Para mi ha sido una eternidad...
Ella le acaricia la mejilla:
--te juro que no pude venir antes...
Su mirada es sincera pero él no entiende qué pudo ser tan grave para tenerla alejada de su lado tanto tiempo...
--¡¡porque tanto misterio..¡¡?
--No, no es misterio... No podía venir...
--¡¡¿y no podías dar señales de vida...?¡¡ ¡¡Yo te esperé, me quedé solo esperándote...¡¡
ella lo besa en los labios y él no la rechaza pero no responde:
--ahora estoy a tu lado, ahora podemos recuperar el tiempo perdido...
Él le acaricia el pelo:
--te lo has cortado... te queda muy bien...
--¿y no te gusta el cambio?
--Me encanta...
Él la estrecha entre sus brazos y la besa. Ambos se besan. Ella lo acaricia:
--te amo Oscar... te juro que eso no ha cambiado...
Él se aparta de ella:
--ni sé si creerte...
--¿porqué?
--Porqué yo te mandé un recado... te dije que te amaba y no te importó...
--No sabes cuánto me ayudó eso... Me dio muchos ánimos para salir adelante......
Oscar trata de entender la ausencia de su amada:
--¿¿ánimos para qué?
Ella lo mira, le acaricia esos rizos:
--desde que te vi, tus rizos me deslumbraron, al conocerte me enamoré de ti...
Él está muy conmovido, goza al estar cerca de ella.
--Regina, si es verdad que me amas... quiero saberlo todo, quiero saber que has estado haciendo lejos de mí... ¿era otro hombre?
Ella le pone las manos en las mejillas:
--No, te juro que desde que supe que me amabas no ha habido otro nombre...
Él se aparta de ella, se lleva las manos a la cabeza:
--¿¿¡y porqué el misterio??¿¿qué estaba pasando?¡
--No hay misterio, eran problemas familiares muy fuertes y no podía pensar en otra cosa...
--¡¡tu primo, kyra... todos desaparecieron...¡¡
--Kyra se mudo, y mi primo ... --hace un silencio para pensar que le va a decir-- se murió.
Oscar piensa en ese chico que lo seguía en el baño, que lo miraba con tanta insistencia. Le da pena.
--lo siento, de verdad que lo siento... Era buena gente... me hubiera gustado ser su amigo...
La noticia de la muerte de Álvaro ha calmado un poco a Oscar.
--por favor... tenemos que hablar, Oscar... creo que almenos me merezco disfrutar de esa amistad que tanto me prometiste... No tienes compromiso conmigo, sólo quiero pasar un rato conmigo...
Ella le acaricia la mano, él tiembla:
--ven conmigo... ¿has cenado?
Él hace que no con la cabeza.
--Alquilé un apartamento unas calles más abajo, ¿porqué no pedimos una pizza y cenamos los dos solos?
--Si vale...
Los dos se miran a los ojos. Él cierra la puerta.
--¿vamos?
Los dos se sonríen. Van caminando.
--¿como es que alquilaste un apartamento aquí cerca?
--Porque llevo mucho tiempo esperando este momento...
--No entiendo, Regina. La verdad es que no entiendo que te impedía acercarte a mí y si te hice saber que dejé a mi novia por ti, que te amaba, tú me prometiste volver...
--y lo hice...
Muy dolido él dice:
--demasiado tarde...
Ella se para, lo toma de la mano. Tiembla. Lo mira a los ojos:
--¿porqué tarde? tu mirada me dice lo contrario...
--Me cansé de esperarte...
--las cosas no pasan cuando uno quiere, sino cuando se puede... No pude venir antes, pero quiero olvidar el pasado... tú siempre fuiste mi sueño y ahora quiero vivirlo... quiero disfrutar de lo que tú me quieras dar...
Regina le acaricia la mano y los dos se sonríen.
--te juro que no voy a comprometerte... sólo quiero vivir este amor que siento como se pueda, como me dejes... Lo que tú dispongas está bien...
--¿tanto me quieres?
Ella lo mira fijamente:
--pídeme la vida y te la doy...
Él la mira conmovido:
--¡¡mi Regina...¡¡ ¡¡has vuelto¡
Oscar siente que es la Regina que conoció, la abraza con ternura.
--te amo... te amo... mi niña hermosa... --dice él acariciándola y llenándola de besos.
Se besan apasionadamente. Los dos están muy felices pero sabe que se tiene que controlar:
--ven, vamos a tu casa...
--si claro.
Los dos van tomados de la mano, se miran bien contento. Ella lo lleva a ese apartamento que en realidad ni conoce.
--espero que esté todo bien...
--¿esperas?
Ella le pone las manos a la mejilla:
--lo alquilé mediante Kyra, yo recién llego y lo primero que hago es verte a ti.
Él sonríe seductor. Se besan apasionadamente. Entran, él la mira pícaro. Cierra la puerta y los dos se quedan solos en un apartamento con muchas ganas el uno del otro, después de haber echado mucho de menos.